Por el Dr. Adrián Rogers - www.eaqv.org
De vez en cuando llegamos a una crisis de potencia
industrial y realmente no sabemos a dónde acudir. Pedro enfrentó una de esas
crisis en Hechos 12. Después de la Pascua, Herodes planificó presentar a Pedro
ante la multitud, y luego matarle. ¿Cómo hubiera enfrentado usted esa crisis?
Comparto con usted cuatro reflexiones que oro le ayuden.
Respete el misterio de la PROVIDENCIA de Dios
Nosotros no vivimos de explicaciones. La vida no es un
problema que debe ser resuelto. Es un MISTERIO que debe ser vivido. A veces
tenemos que retroceder y sencillamente RESPETAR la oculta mano de Dios (ver
Isaías 55:8-9).
En Hechos 12 vemos el malvado poder de Herodes, la injusta
muerte de Santiago y, de pronto, ¡Pedro es liberado! Dios en su sabiduría,
mezcla todas estas cosas para su gloria y “todas las cosas ayudan a bien”. No
podemos vivir de explicaciones. Sino más bien, VIVIMOS de PROMESAS. Si usted
tiene una crisis, CONFÍE en que Dios sabe lo que hace, y qué es lo mejor para
usted y todos los involucrados (léase Proverbios 3:5-6).
Hechos 12:6 nos dice que Pedro estaba bajo máxima seguridad,
y tenía sentencia de muerte. Amigo, esa crisis cerró todas las puertas, menos
una: la PUERTA de la ORACIÓN. Cuando no hay esperanza en el plano horizontal,
siempre hay esperanza en el plano vertical.
La IGLESIA estaba ORANDO continuamente por Pedro. Debemos
ser persistentes en la oración. Lucas 11: 9-10 nos dice que debemos mantenernos
pidiendo, buscando, llamando. Las demoras de Dios no son negaciones.
¿Puede usted orar fácilmente, o genuinamente agoniza en
oración cuando intercede por otros? Orar es trabajoso y algunas veces no
sentimos deseos de orar. Si alguna vez existe un momento en que necesita orar,
es cuando no desea orar. Debemos ORAR hasta que nos den ganas de ORAR.
El mundo puede reírse, pero amigo, el diablo no se ríe.
Alguien sabiamente dijo que “el diablo tiembla cuando ve al más débil de los
santos de rodillas”.
Repose en la magistral PAZ de Dios
Hechos 12:6 nos dice que Pedro estaba durmiendo la noche
antes de ser ejecutado. Hechos 12:7 nos dice que él estaba tan profundamente
dormido que el ángel tuvo que tocarle en un costado para despertarle. ¿Cómo
Pedro pudo estar durmiendo en semejante crisis? Primero, porque Pedro ya no
temía a la muerte.
La muerte no representa ningún terror para el hombre que ha
tenido un encuentro salvador con Jesucristo. Si un hombre que enfrenta la
muerte debido a su fe puede ver que a través de la tumba vacía llega a ser uno
con el Señor Jesucristo, eso le dará la PAZ necesaria para enfrentar cualquier
tribulación. El Señor Jesucristo vino para liberarnos de la esclavitud del
temor de la muerte (ver Hebreos 2:15).
Segundo, Pedro sabía que la iglesia estaba bombardeando el
cielo orando por él y es la razón por la cual estaba durmiendo. ¿Se encuentra
usted en medio de una crisis? Ponga su problema en manos del Señor. Confíeselo
al Señor.
Sin que importe cuán grande sea su problema, Dios lo quiere
intercambiar con su PAZ. Los soldados pensaron que estaban custodiando a Pedro
en la prisión. ¡No! La PAZ de Dios lo custodiaba. ¡La PAZ de Dios resguardaba a
Pedro por los cuatro costados!
Regocíjese en la majestad del PODER de Dios
Usted puede estar pensando que Dios es débil y que no puede
hacer nada, o que a Dios no le preocupa, ni le interesa. Incluso puede
preguntarse: “¿Dónde está Dios? ¿Es Él capaz? ¿Le importa a Dios?”
Creo que es importante en este relato de la liberación de
Pedro que la misma llegó en el último momento. Parece que Dios tomó su tiempo
para resolver la crisis de Pedro. De hecho, toda esta historia en Hechos 12
está marcada por la calma.
Vino un ángel, tocó a Pedro en un costado y le dijo: “Pedro,
despiértate.” A lo mejor Pedro le preguntó: “¿Qué hora es?” Seguidamente, no
hay una sensación de apuro o de escape. Ellos sencillamente salieron. Cada
soldado estaba o dormido o en un estado de trance. Cada cerradura se abrió, y
luego el ángel lo dejó.
Si usted está en una crisis y Dios no le ha liberado,
recuerde que Dios no liberó a Santiago, y no es porque Él no pudo hacerlo.
Usted puede respetar el misterio de la PROVIDENCIA de Dios, requerir el
ministerio del PUEBLO de Dios, reposar en la magistral PAZ de Dios y
regocijarse en la majestad del PODER de Dios.