Del libro “Loved back to life” - "Amado de vuelta a la vida"
Por: Sheila Walsh
De vez en cuando, una oveja dará a luz a un cordero y lo
rechazará. Hay muchas razones por las que ella puede hacer esto.
Si el cordero regresa a la oveja, la madre puede incluso
patear al pobre animal. Una vez que una oveja rechaza a uno de sus corderos,
nunca cambiará de opinión. Este corderito inclinaran la cabeza tan bajo que
parece que algo está mal con su cuello. Su espíritu está roto…
Estos corderos se llaman “bummer lambs” (huerfanos o
rechazados)”. A menos que el pastor intervenga, el cordero morirá, rechazado y
solo…
Entonces, ¿sabes lo que hace el pastor? Lleva al pequeño
rechazado a su casa, lo alimenta a mano y lo mantiene caliente junto al fuego.
Lo envuelve con mantas y lo sujetará contra su pecho para que el rechazado
pueda escuchar los latidos de su corazón…
Una vez que el cordero es lo suficientemente fuerte, el
pastor lo colocará nuevamente en el campo con el resto del rebaño…
Pero esa oveja nunca olvidara cómo el pastor lo cuidó cuando
su madre lo rechazó… Cuando el pastor llama al rebaño, ¿adivina quién corre
hacia él primero? Así es, la oveja rechazada. Ella conoce su voz íntimamente.
No es que el cordero rechazado sea amado mas, es que conoce íntimamente a quien
lo ama. No es que sea amado más, solo lo cree porque ha experimentado ese amor
cara a cara…
Muchos de nosotros somos corderos huérfanos, rechazados y
quebrados. Pero Jesucristo el buen pastor. Se preocupa por todas nuestras
necesidades y nos mantiene cerca de su corazón para que podamos escucharlo latir.
Podemos estar rotos pero el Pastor nos ama profundamente…